Masajes Relajantes Con Aromaterapia

MASAJES RELAJANTES CON AROMATERAPIA

En casi todos los antiguos cultos, desde el comienzo de los tiempos, los seres humanos se han sentido atraídos por los fascinantes aromas de la Naturaleza que, sabia como siempre, les ha indicado a través del olfato los benéficos aportes para la curación de enfermedades del cuerpo y del alma.

Los primeros artesanos reconocidos en la elaboración de aceites esenciales fueron los egipcios, con técnicas desarrolladas posteriormente por los grandes alquimistas griegos y difundidas por los romanos a través de toda Europa. Los árabes perfeccionaron definitivamente los sistemas de obtención de estas esencias, que desde siempre han estado incorporadas a la vida diaria del Hombre, guerrera, espiritual o de esparcimiento, en forma de baños, inhalaciones, alimentos, ritos o magia, o en forma de compresas y ungüentos para preservar la salud física y mental.

Los efectos de los aceites son múltiples y varían en función del aceite seleccionado. Así, hay aceites relajantes, tonificantes, descongestionantes, hidratantes, purificadores, bactericidas, antiestrés,… Además, el olfato está conectado con el sistema límbico, parte del cerebro que se encarga de controlar las emociones, y posee importantes funciones relacionadas con la memoria. Por este motivo, el olor de los aceites influye directamente sobre el estado de ánimo.

La aportación de la medicina tradicional oriental a través de su investigación sobre las plantas medicinales y su efecto sobre cada uno de los cinco elementos, permite potenciar la utilización terapéutica de los aceites esenciales, ya que, según una dolencia, enfermedad o estado de ánimo específico, se puede utilizar la esencia adecuada para ayudar a reequilibrar ciertas funciones del cuerpo y de la mente, así como los distintos estados anímicos.

El Masaje es uno de los mecanismos de aplicación de los aceites, en el que la fricción ayuda a mejorar su penetración a través de la piel. En los masajes de Aromaterapia se utilizan dos tipos principales de aceites: El aceite base, que puede ser vegetal (habitualmente de girasol, almendras, coco o sésamo) o mineral (ideal para personas con alergias) y el aceite esencial o aromático, que se mezcla en pequeña cantidad con el primero para conseguir los efectos terapéuticos según las propiedades específicas de la esencia empleada. El masaje manual puede complementarse con la aplicación de elementos tales como piedras de basalto calientes, saquitos termoterapéuticos con hierbas medicinales, o gemas específicas con propiedades energéticas.

En Zenkei tenemos en cuenta todos estos conceptos y conocimientos para que cada masaje sea único no sólo para cada persona, sino para cada momento vital de la misma, con lo que los resultados pretendidos no son solamente relajantes, sino también terapéuticos y reequilibradores de todos los aspectos de la persona.